viernes, 25 de enero de 2013

" NIHIL EST AETERNUM"

        ("Nada es eterno")
Tal la hoja seca y ligera
de un árbol que se derrumba
cuando un huracán lo zumba
con violenta ventolera.

Así la fugaz quimera
de esta vida se nos tumba
y, de la cuna a la tumba,
va en rauda y febril carrera.

Y, aunque el amor nos hechiza
con su luminosa lumbre
que nuestro dolor suaviza,

hay siempre una certidumbre:
el amor queda en ceniza
y la vida, en podredumbre…

EPITAFIO A UN POETA


    Aquí yace un  aprendiz
de poeta, un hombre fiel
a su extremeña raíz
que cultivó tal vergel.

   Nunca humilló su cerviz
ante el humano tropel
que le impidió ser feliz,
colgándole un mal cartel.

  Soterrado tal lombriz,
descansa en paz este abel
en su terrena matriz.

  De su lírico papel
el tiempo será tamiz…
¡Rogad al Señor por él!